
Mario se animó, total nada perdía. ¿Eres de estos lados?- Preguntó.
-No- respondió ella tímidamente.
Ambos sentían fascinación por el misterio que emanaba del otro. Se citaron para verse esa noche y así surgió su historia de amor. Fueron felices, el amor se desbordaba por los poros aún cincuenta años después de casados, el brillo en los ojos de los dos delataba lo tanto que se querían.
Muchos años después en su lecho de muerte Mario le preguntó a Laura hacia dónde iba esa tarde que se conocieron. Ella le contestó que su madre la había enviado a la ciudad para que entrara al convento, pero se había perdido. Laura, recordando con nostalgia ese día le hizo la misma pregunta y él con el poco aliento que le quedaba le dijo, que ese día renunció al seminario y a convertirse en sacerdote. Nunca sabemos la manera en que se mostrará Dios en nuestra vidas, pero siempre será con el amor.
4 comentarios:
ay q lindo! hacia mil que no pasaba por los blogs! es lindo volver y encontrar estas cosas.
un beso :)
tu como q ta enamorado ! ahora todo es con amor !! lol jejej yo se que no es que esas historias sacan el cursi q hay en ti jajajajaj mira !! vamo pa la playita el jueve :D ?
oiga joven! le deje una tarea en mi blog!
jijijijiji
Y es que mientras más leía más me recordaba mi historia de "ella y él" creo que haríamos una buena composición en conjunto.
Bisous!!!!!!
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